La “Cena de la traición”. Herido y furioso tras la desactivación de su candidatura presidencial, Daniel Scioli descargó en privado toda su ira contra el albertismo, en una conversación que tuvo con la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner.
El embajador de la Argentina en Brasil estalló contra el presidente Alberto Fernández y 2 de sus funcionarios de máxima confianza, el canciller Santiago Cafiero y la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz: “Me usaron como a un forro”.
Scioli mastica la bronca y plantea en privado que el Presidente y 2 de sus funcionarios más cercanos lo engañaron y lo “usaron”. El jefe de Estado logró colocar a Agustín Rossi como vice de Sergio Massa en la fórmula de Unión por la Patria y a Cafiero y a Tolosa Paz entre los principales lugares de la nómina de diputados nacionales por la provincia de Buenos Aires.
El ex gobernador bonaerense le envió un durísimo mensaje al Presidente, en la conversación telefónica que tuvo con la líder del oficialismo tras el cierre de listas: “En 30 años de política nunca nadie me traicionó como Alberto”.
En plena tensión ambos se vieron las caras este lunes en la visita de Alberto Fernández a Brasil, donde se reunió con Lula da Silva. El Presidente respaldó al embajador, vía Twitter: “Quiero agradecerle especialmente a mi compañero y amigo la generosidad y compromiso demostrado para deponer deseos personales y privilegiar el bien del país, como ha hecho siempre en su valiosa trayectoria”.
Asimismo, Scioli acusa al Canciller, que trabajó en su campaña presidencial, de haberle “robado” un lugar en la lista para diputados nacionales en la provincia de Buenos Aires, cargo por el que competirá al igual que Tolosa Paz, y el dirigente negó las acusaciones.
El jueves previo al cierre de candidaturas hubo una cena de Scioli con sus allegados en su casa en Villa La Ñata, incluso con el Presidente, en una reunión con “traiciones”. Le advirtieron que iba a llamarlo Cristina Kirchner y que no le atendiera, en momentos en que, presuntamente, lo estaban “negociando como moneda de cambio”.