La gobernadora de Río Negro, Arabela Carreras, la pasó mal durante un acto por el Día del Trabajador en Bariloche, donde se postula para ser la próxima intendente. La mandataria provincial participó de una fiesta del sindicato de mercantiles en una discoteca del centro de la ciudad e intentó dar un discurso, pero fue fuertemente repudiada por los presentes.
“Más de 20 años trabajando juntos con la familia mercantil, la verdad que es una alegría, un orgullo, es una emoción cada vez que nos encontramos”, dijo en medio de silbidos Carreras, que antes había sido elogiada por el jefe del gremio.
Para Carreras es un revés fuerte porque, tras su mandato como gobernadora, se postula como intendente de Bariloche, la ciudad más grande de Río Negro. Ella es parte de Juntos Somos Río Negro, pero está enfrentada con el mandatario provincial electo Alberto Weretilneck, que la corrió por completo de la campaña y la culpó por los conflictos que lastraron el final de su trayecto.
La semana pasada Carreras amenazó con ir por fuera de JSRN en las elecciones de Bariloche, ya que Weretilneck promueve una interna. En el acto donde fue silbada ella, estaba presente el intendente Gustavo Gennuso, de Juntos por el Cambio, que viene de recriminarle por haber anticipado la campaña en la ciudad, donde la elección será el 3 de septiembre.