El operador platense y ex diputado bonaerense, Gabriel Bruera, quien conforma el denominado trio político de “los hermanos macana” junto al ex intendente Pablo Bruera y el procesado por la Justicia Mariano Bruera, fue captado el miércoles al mediodía en una situación al menos sospechosa, si acaso se tienen en cuentas alguno de sus malos antecedentes.
Archiconocido es el legajo delincuencial de los hermanos Bruera, otrora capitostes políticos de la ciudad de La Plata. Mientras Pablo fue intendente durante 2 períodos consecutivos por el peronismo local, sus hermanos jugaron un rol clave para la manutención del poder: Gabriel como operador político y Mariano en el manejo y control territorial, a fuerza de patotas y barrabravas.



De Pablo Bruera, quien como jefe comunal solo será recordado por la trágica inundación de La Plata en abril de 2013, al mentir diciendo que estaba al frente del operativo de socorro a los vecinos cuando en realidad se encontraba tomando cerveza en las playas de Río de Janeiro, poco se sabe hoy. Se rumorea que está en el negocio de la representación de jugadores de fútbol. Y no más.
Vale recordar que el ex jefe comunal estaba en Miami de “vacaciones”, mientras la localidad platense se inundaba en hasta un 90 por ciento (se salvó Villa Elvira). Y hasta con un tuit antiguo le tomó el pelo a los habitantes haciendo que “ayudaba”.
Por su parte, junto a otros ex funcionarios, Mariano se encuentra procesado por “asociación ilícita, cohecho pasivo y exacciones ilegales” en la denominada Causa “Coimas en el Plan Procrear”. El juicio oral está previsto para el segundo semestre de este año.
Y las más reciente andanzas de Gabriel fueron intentar retener algo del menguo poder que le quedaba “al triunvirato delincuencial”: La presidencia y control del PJ La Plata. Aunque, tras las recientes elecciones internas y el fuerte desembarco del kirchnerismo/camporismo, perdieron espacio y se debieron conformar con la secretaría general, en cuyo lugar ubicaron al ignoto rosquero barrial, Esteban Concia.
Ahora bien, ¿Qué se registró este miércoles al mediodía de miércoles, a pocos metros de la Casa de Gobierno bonaerense?



Junto a un desconocido, con signos de nerviosismo, Gabriel Bruera estacionó en clara infracción un vehículo en el descanso del cruce de las céntricas calles 54 y 6. Con total impunidad, allí estuvieron varios minutos a la espera de alguien o algo. O ambas cosas: de alguien con algo. Es que en el mundillo platense, se recuerdan los malos y adictivos hábitos del más sonriente de los tres picaros sinvergüenzas de la política platense.
*Fuente: Ulises Catriel Cuenca -Especial para Data24-