Durante el acto del Día de la Bandera, Cristina Fernández criticó duramente a los movimientos sociales por la administración de los planes. La burócrata remarcó que es prioritario que el Estado nacional “recupere el control, la auditoría y la aplicación de las políticas sociales que no pueden seguir tercerizadas”.
“No pueden seguir tercerizadas. Creo y creo que, además, ojo, sé que hay cooperativas que laburan, que producen, que hacen cosas… Pero es el Estado el que debe tener el monopolio… así como el Estado debe tener el monopolio de la fuerza ¿o se le ocurre a alguien que podemos tercerizar la policía o…? No, el Estado debe recuperar ese rol y transparentar frente a la opinión pública todo esto”, agregó la mandataria.
Las confusas declaraciones de CFK (a fin y al cabo, es quien promulgó lo que ahora critica), pegaron fuerte en el sector piquetero, que, desde que asume el Frente de Todos, controlan el Ministerio de Desarrollo Social.
Desde el Movimiento Barrios de Pie, Silvia Saravia y Daniel Menéndez, señalaron que “Somos protagonistas y dirigentas en las organizaciones que estamos en las calles, enfrentando el modelo de pobreza y precarización laboral de tu gobierno, Cristina Fernández de Kirchner”.
El eterno Eduardo Belliboni, del Polo Obrero, aprovechó a tirar unos muertos, al señalar que “A 20 años del asesinato de Maxi y Darío (por Kosteki y Santillán), Cristina Fernández de Kirchner muy cerca de donde cayeron, por responsabilidad política de varios funcionarios de su Gobierno, se sumó a la campaña antipiquetera, mientras pacta con los punteros repodridos de los intendentes”.
Quien rotula el titulado de esta nota es el reconocido Luis D’ Elía, quien, en tono bélico afirmó que: “Estoy muy dolido por la declaración de guerra que nos hizo Cristina a todos los movimientos sociales”. Y luego comentó: “Flojita de memoria y de agradecimiento Cristina nos declaró la guerra a todos los movimientos sociales de la Argentina en general y a los kirchneristas en particular mientras la CTA de Hugo Yasky la aplaudía. Ni una sola palabra de apoyo al presidente Alberto Fernández. Horrible”.