Ante el aumento de la carne vacuna durante el mandato de Mauricio Macri, fueron varios los militantes y ahora funcionarios que se quejaban de la supuesta imposibilidad de disfrutar de un asado el fin de semana. Por ello, en el año 2019 con las elecciones presidenciales aproximándose el Frente de Todos realizó una campaña que hoy sigue siendo recordada: “Si queres volver al asado, votá bien”.
Actualmente estas promesas quedaron olvidadas o, en realidad, enterradas en toneladas de kilos de polenta. Desde DATA24 realizamos un relevamiento, basándonos en información pública, y pudimos constatar que durante todo el año 2022 se destinó una suma de $2.163.937.641,00 (DOS MIL CIENTO SESENTA Y TRES MILLONES NOVECIENTOS TREINTA Y SIETE MIL SEISCIENTOS CUARENTA Y UN PESOS) en polenta.
La suma gastada podría ser mayor, teniendo en cuenta que algunas de las licitaciones estatales que solicitaban polenta fueron “disfrazadas” bajo otra carátula para evitar burlas.
A pesar de las insistentes manifestaciones de las organizaciones sociales que clamaron “dejen de enviar polenta a los comedores populares”, la administración del Ministerio de Desarrollo Social compró 12.763.610 kilos de harina de maíz durante todo el periodo mencionado, desoyendo así los reclamos de los más vulnerables.
Centrándonos únicamente en las compras ya adjudicadas, es decir, donde las arcas estatales ya desembolsaron los gastos, podemos decir que la primer compra de polenta se formalizó en el Boletín Oficial bajo la Decisión Administrativa Nº696/2022, en el mes de julio. El jefe de Gabinete, Juan Manzur, y el entonces ministro de Desarrollo Social, Juan Zabaleta, aprobaron la adquisición de 4.016.500 unidades de paquetes de polenta de 500 gramos (2.008.250 kg) por una suma total de $407.933.837,28.
Bajo el número de proceso 95-0025-LPU22, en el mes de agosto se solicitó la compra de 1.338.840,00 paquetes de polenta con “la finalidad de cumplir con los compromisos de asistencia alimentaria, para atender a la población en situación de vulnerabilidad durante el presente año”, según dicta la Resolución adjunta. Para atender este urgente pedido del Gobierno, fueron 16 los proveedores que se presentaron, pero sólo CAREAGA HNOS Y TEGLIA S.R.L fue beneficiado con un monto de $149.093.222,40.
Caratulado como “adquisición de sémola molida fina”, el Gobierno volvía a comprar miles de kilos de polenta, a pesar de que los reclamos continuaban al alza y los líderes de las organizaciones sociales reclamaban por alimentos de calidad nutricional.
La compra aprobada julio, pero que solicitó una pronta ampliación de unidades en el mes septiembre, exigió 4.016.520 de kilos de “sémola molida”. Las empresas ganadoras de esta licitación fueron INVERSIONES PARA EL AGRO SA y ALIMENTOS FRANSRO S.R.L por un total de $540.118.982,00.
Dos meses después, en noviembre, desde la cartera que comanda Victoria Tolosa Paz pedirían nuevamente una gran cantidad de “sémola de maíz de cocción rápida”. En este último pedido aprobado desde la página web estatal, se solicitó la cantidad de 2.700.000 de paquetes de polenta por una suma de $593.946.000,00 que fueron abonados a la empresa ALIMENTOS FRANSRO S.R.L.
También en noviembre, realizaron otro pedido por la misma cantidad (2.700.000 unidades de paquetes de polenta). Nuevamente, la empresa ganadora resultó ser ALIMENTOS FRANSRO S.R.L por un total de $472.845.600,00.
Lo que se traduce en un total anual de $2.163.937.641,00 destinados únicamente en polenta -alias: harina de maíz o sémola molida-.