Según los resultados provisionales, el triunfo de las elecciones internas fue para Marcos Carasso, el candidato del oficialismo de la UCR que representan Negri y Ramón Mestre, por el 58% de los votos, sin embargo, Lousteau celebró que su postulante, Rodrigo de Loredo, haya quedado a sólo un 3% de los sufragios del primero, asegurando que no perdió.
Esta tarde, Lousteau declaró que sus adversarios “hoy reconocen que (el comicio) está muy parejo, pero no hay un solo dato oficial a 18 horas del cierre de las urnas”.
“En Córdoba quedó muy claro que hay otro radicalismo en marcha, que es el que quiere salir del encierro y la comodidad para debatir de cara a la gente cómo cambiar la realidad, el radicalismo que quiere hacerse cargo”, agregó, tras lo cual recordó que “hasta hace una semana habían bajado la lista de Rodrigo De Loredo porque se suponía que ni siquiera cumplía con los requisitos mínimos, pero ayer fue apoyada por la mitad de los radicales que participaron de la elección”.
Por su parte, Negri señaló que sentía que su “obligación era cerrar las heridas del partido” y que “por eso buscaba la unidad”. En esta oportunidad no fui candidato a ningún cargo. Desde mi experiencia de tener muchas internas en el lomo, le diría a los que perdieron ayer que hay que ser buen perdedor y que lo principal es estar juntos cuanto antes en Córdoba. Me alegra que hayamos ganado desde la lista Convergencia también la Juventud Radical”.
De acuerdo con los números del sector de Negri y Mestre, la lista ganadora logró 18.767 votos contra 15.886 de su rival, mientras que los partidarios de Lousteau hicieron circular una planilla en la que Carasso tiene 17.001 sufragios (51,73%) mientras que De Loredo alcanza 15.866 (48,27%), con diferencias incluso en las cifras de algunos de los municipios.
Según dejaron trascender los allegados a Lousteau, “Negri operó que había ganado por 20 puntos y fue otra mentira porque el resultado que fue mucho más ajustado, una diferencia de apenas 1100 votos sobre 33 mil votantes, lo que marca que fue prácticamente un empate entre la superestructura partidaria y el armado del senador que encabezó Rodrigo De Loredo y que implica que la representación nacional es 50 y 50 (delegados al Comité Nacional, son dos para el espacio de Lousteau y dos para Mestre) y se reparten casi por mitades el congreso provincial”.
Consideraron, además, que el resultado de Córdoba “es un gran empujón” para el domingo próximo en la provincia de Buenos Aires, donde habrá comicios para presidir la conducción partidaria en los que el marplatense Maximiliano Abad, presidente del bloque de diputados provinciales y candidato de Negri y la dirigencia tradicional de la UCR, se enfrentará el intendente de San Isidro, Gustavo Posse ,el postulante apoyado por Lousteau, Emiliano Yacobitti y Enrique “Coti” Nosiglia.
Para los colaboradores de Negri, sus rivales “no pueden alegrarse por la derrota porque sólo hicieron una fuerte diferencia en dos comunas, mientras que nosotros ganamos la interna por la conducción del partido en Villa Carlos Paz, La Cumbre, Belle Ville y Marcos Juárez, entre otras”.