El magro desempeño de Ricardo Bussi como candidato a gobernador de Javier Milei en las últimas elecciones tucumanas fue un golpe duro para el dirigente libertario. Sin embargo, el nombre figurará primero en la lista de diputados nacionales de su partido, Fuerza Republicana, que irá pegada a la boleta presidencial de La Libertad Avanza.
Es una jugada mediante la que busca dejar atrás el 3,9 por ciento de los votos que cosechó el pasado 11 de junio, al tiempo que demuestra la buena sintonía que, a pesar del mal trago, aún mantiene Bussi con el economista.
Es que, a pesar de sus repetidas visitas a Tucumán a lo largo del último año, que incluyeron caminatas por el centro capitalino y el respaldo a propuestas polémicas, como liberar la tenencia de armas para defensa personal, Milei había decidido tomar distancia del resultado malogrado por uno de sus principales aliados. “¿Ustedes vieron mi cara en la boleta?”, respondió, sin mencionar a Bussi, cuando se lo interpeló al respecto durante una entrevista televisiva.
Sin embargo, según pudo saber la prensa, el trato entre ambos fue completamente diferente en el plano privado. Una vez conocidos los decepcionantes números de la elección tucumana, Milei y Bussi hablaron por teléfono, ahuyentaron los fantasmas y dejaron sentadas las bases para el trato que terminó de sellarse el pasado fin de semana.
Bussi no es un referente provincial más para Milei, quien anunció oficialmente a muy pocos dirigentes como sus representantes en las competencias locales de los distintos distritos del país (era la octava vez que se postulaba para gobernador). El líder de Fuerza Republicana y actual legislador provincial se erigía como una de sus mayores apuestas. Sin embargo, nada fue lo que se esperaba en el campamento libertario: la performance tucumana resultó, hasta el momento, la peor para un candidato apoyado por el “León”. Más aún, teniendo en cuenta que Bussi había obtenido el 13,8 por ciento en 2019, sin la compañía del libertario.
En mayo, La Libertad Avanza había anunciado un lineamiento de carácter estratégico, que se pareció demasiado a un movimiento defensivo: que todos sus esfuerzos estarían puestos únicamente en instalar a Milei como candidato presidencial.
Por su parte, luego del decepcionante resultado en las provinciales, Bussi despotricó contra el oficialismo tucumano y su “tremendo aparato corrupto y monstruoso”. “El peronismo se asegura 4 años de abundancia y vos que los votaste, te asegurás cuatro años de pobreza, de falta de obras, inseguridad y una peor educación”, lanzó, tras hacer referencia al reparto de “dádivas” que graficó al señalar que se trataron de “unos pocos pesos y un par de bolsones”. Contra ese “aparato” deberá volver a enfrentarse en las PASO de agosto, ahora sí acompañado por el rostro de Milei en la boleta.