La organización progresista que fue la causante de los disturbios generados por el asesinato de George Floyd a mediados del año 2020 tendría los días contados al ver que sus números cerraron con un endeudamiento de casi 9 millones de dólares, a pesar de sus intenciones de querer seguir insistiendo con financiar ciertas políticas.
La ONG fundada por la activista Patrisse Cullors, según los cálculos hechos por Free Beacon, logró incrementar sus números rojos al doble a comparación de lo que pudieron recibieron a lo largo del último periodo transcurrido.
Tras haber recaudado una cifra de U$D 42 millones, el propio movimiento finalizó con un balance económico de 30.000.000 de la moneda americana. Estos números asustarían a los fundadores de Black Lives Matter, a pesar del monto recibido de 90.000.000 en un año entero.
Las principales causas que generaron este gran déficit, según la información que brindó Americano Media, fueron las conexiones con el hermano de la ex líder de la organización, Paul Cullors, quien supo utilizar la imagen de los afroamericanos para bienes personales, mientras éste recibía un sueldo de alrededor de 125 mil dólares al mes.
No solo el desastre se generaría con ello, sino también con el registro de varios integrantes no determinados que recibían pagos cercanos a los US$ 600 mil. Por otra parte, y el que más afectó a este movimiento en cuanto a endeudamiento, fue el gigante desembolso en repertorios sin utilidad alguna.
Este despilfarro de fondos conllevó a que, entre estos dos últimos años transcurridos, lo recaudado cayera casi un 90%, habiendo solo conseguido obtener 9,5 millones de dólares.