El IOMA ha llevado al sector de internación domiciliaria al ahogo económico financiero, hasta el límite de la desaparición. ¿Qué ocurre con la internación domiciliaria en provincia de Buenos Aires? ¿Cuáles son los motivos de la gestión de Axel Kicillof?
Las empresas de internación domiciliaria aseguran que ya no pueden seguir trabajando ni sosteniendo las prestaciones a sus pacientes debido a los bajos valores que les paga el Instituto Obra Médico Asistencial (IOMA) y a la falta de reconocimiento de la labor que realizan.
En esa línea, vale destacar que alrededor de 6 mil afiliados a la obra social bonaerense reciben internación domiciliaria todos los días en sus casas. De ellos, alrededor de 24 mil prestadores trabajan brindando servicios a dichos pacientes. No obstante, la gestión Homero Giles se niega a aceptar que bajo los valores que paga esas prestaciones ya no se pueden sostener.
Para muestra, falta un botón. La inflación acumulada de estos últimos cuatro años es de aproximadamente 985 por ciento. Los convenios del personal de sanidad aumentaron un 1054 por ciento, ante esta realidad el IOMA reconoció en cuatro años de gestión para el sector un aumento paupérrimo, totalmente desfasado de la realidad: 251 por ciento en cuatro años, lo que marca una diferencia de + 750 por ciento entre la inflación y los aumentos de IOMA. Y a eso hay que sumarle que las prestaciones se abonan cuatro meses después de brindada la prestación, depreciando todavía más los ingresos de los trabajadores del rubro.
En comparativa con otros sectores de IOMA, que también fueron insuficientes, los porcentajes de aumentos recibidos fueron muy superiores a los de la internación domiciliaria:
- Rehabilitación: 589 por ciento
- Plan Cuidarte (cuidados paliativos): 504 por ciento
- Cuidador domiciliario: 416 por ciento
- Internación Domiciliaria: 215 por ciento
Si se considera el valor del personal de casas particulares, para asimilarlo al valor de cuidador domiciliario: + 600 y +740 por ciento, en algunos casos, es la diferencia entre los aumentos que percibieron los trabajadores de casas particulares y los aumentos de los valores del IOMA.
Finalmente, la gestión de Axel Kicillof pareciera no tomar en cuenta ni reconocer la inseguridad a la que todos los días se someten los profesionales trasladándose a los domicilios de los pacientes. En definitiva, las empresas necesitan hoy una recomposición arancelaria de minina del 295 por ciento para seguir operando o, más temprano que tarde, 6 mil pacientes quedaran sin servicio y 24 mil familias sin trabajo.
Si las autoridades del IOMA no reconocen en la inmediatez la labor que llevan a cabo las empresas de internación domiciliaria, brindando asistencia a pacientes con complejidades médicas, en barrios vulnerables, en zonas donde nadie llega más que ellas, finalmente será imposible poder sostener las fuentes laborales, condenando el organismo además a la desatención de los pacientes, a la pérdida de puestos de trabajo y a la desaparición de empresas.
¿Quién es Homero Giles?
Es oriundo de Ituzaingó (Corrientes). El militante de La Cámpora y ex funcionario del Ministerio de Salud de la Nación durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner, fue designado en IOMA en el año 2019.
Ostenta un perfil bajo. Es parte del riñón de La Cámpora, íntimo del Gobernador (Axel Kicillof), de Daniél Gollán (actual diputado, ex Ministro de Salud PBA de y Nación), de Nicolás Kreplak (actual Ministro de Salud de Buenos Aires), de Wado” de Pedro y del “El Cuervo” Larroque.
El médico K supo construir poder y digitar las prestaciones de más de 2 millones de afiliados, de los cuales más de 500.000 son los propios empleados públicos de la Buenos Aires de Kicillof.