El ex periodista de Clarín que actualmente se desempeña en Infobae, Darío Gallo, analizó la causa del atentado fallido contra la vicepresidente y se mostró ofuscado por los pocos interrogantes interesantes que se ha hecho la Justicia.
En ese contexto, este fin de semana se mostró descontento por el avance de la causa y twitteó: “Hace unos años ¿2010? Hubo filtraciones de documentos de la SIDE donde aparecían informes de distintas agrupaciones piqueteras o similares, con letra de infiltrados que relataban todo. Estos agentes se mimetizaban e informaban desde adentro del grupo”.
Seguidamente, continuó: “Ya en esa época los informes se enviaban por mails (se filtrarían distintas carpetas -hasta de funcionarios-), donde los encubiertos reportaban novedades con sus nombres de fantasía. ¿Qué más hacían los infiltrados? Vaya a saber”.
Luego, Gallo comenzó a hilar su teoría y a unirla con la causa del atentado y la autora intelectual del plan fallido: “En noviembre de 2021, Brenda Uliarte se hacía llamar Ámbar. Y asistió a un acto de Parque Lezama donde también estaba el influencer El Presto, pero no le habló. Se ubicó cerca. Más tarde lo contactaría por Instagram para contarle que lo vio y para elogiarlo: ‘Estaba detrás tuyo'”.
Fue tras estos comentarios que abrió el interrogante: “¿Puede haber sido Ámbar (Brenda Uliarte) una inorgánica de algún sector de Inteligencia para infiltrar sectores de derecha o libertarios? Si lo que dice El Presto se puede probar, ¿Ámbar para quién trabaja?“.
Por otra parte, en las últimas informaciones que surgieron en la causa, afirmaron que “Ámbar” estaba “obsesionada” con el comunicador El Presto, a tal punto de contactarse con un “hacker” para que pudiera saber sus movimientos y revisar sus charlas.
Algo que destacó Gallo al igual que El Presto en su descargo vía Instagram, es que Brenda Uliarte no mantuvo nunca una misma red social y además, el uso de términos ajenos a un ciudadano común: “cambiaba con frecuencia de cuentas en redes con distintos seudónimos, su padre es ferviente kirchnerista y ella dice todo lo contrario. En su último vivo en libertad usó el término ‘civiles’ (de uso no habitual en civiles)”.
En ese contexto, deslizó: “Si llevan a declarar al Presto y se conectan los puntos tal vez de despejen estos misterios”. Finalmente, concluyó: “No sería la primera vez que grupos de jóvenes rebeldes sean infiltrados y terminen favoreciendo a los sectores políticos que ‘enfrentan’. ¿El atentado? Es otro capítulo. Hay que averiguar quién es Ámbar o Brenda, que había llegado hace pocos meses a ‘los copitos'”.