El presidente del Consorcio Portuario de Mar del Plata, Gabriel Felizia, se encuentra en la mira de todos, no solo por su cercanía con la titular de la Administración Nacional de Seguridad Social (ANSeS), Fernanda Raverta, sino más bien por sus inconvenientes a la hora buscar cerrar su blanco.
Felizia se encuentra trabajando en la Dirección Provincial de Actividades Portuarias, con un salario de 436 mil pesos. Anteriormente, tenía un contrato con la Municipalidad de General Pueyrredón (MGP), lo cual verifica que siempre resultó ser un empleado que cobró del sector público.
Ahora bien, si uno revisa lo que son sus consumos, en cuanto al consumo de tarjeta de crédito, tiene 200 mil pesos, con el plástico del Banco Provincia de Buenos Aires. Mientras que como persona física, la AFIP lo dio de baja por no pagar las cargas patronales ni hacer el reempadronamiento.
Por otro lado, Felizia, como funcionario, por más que se encuentre en un alto rango, debería estar registrado con las Aseguradoras de Riesgos del Trabajo (ART) y no es así. Por lo que está violando las leyes laborales del Ministerio de Trabajo, tanto nacional como bonaerense.
El “Lado B” del portuario K
Felizia tenía una sociedad llamada Safemar SRL en Mar del Plata y la AFIP, en el 2011, la dio de baja por no presentar las declaraciones juradas, ni pagar las cargas patronales. Asimismo, también tenía otra llamada Pesquera MG Mar SA, y el ente le bajó el pulgar por el mismo inconveniente, sumado a una evasión fiscal.
Además, tuvo una empresa llamada La Línea Transporte SRL, y con la misma situación que las demás, en el 2011 la AFIP se la da de baja por no presentar declaraciones juradas ni pagar las cargas patronales, mucho menos los impuestos.
Por último, un dato de color, pero no menor: se encuentra casado con Daiana Silva, a quién la dio de baja la AFIP, por no pagar las cargas patronales, y está jubilada con la mínima. Mucha empresa, pero pocos pagos.