Gérald Darmanin, ministro del Interior de Francia, anunció su nuevo objetivo de crear 3.000 puestos para nuevos oficiales de “policía verde”, medida que considera necesaria para enfrentar el cambio climático y proteger a Francia contra los incendios forestales.
En una entrevista con Le Journal du Dimanche, Darmanin explicó que mantener a Francia a salvo del calentamiento global y el cambio climático requiere entregas masivas de soplones y castigadores militarizados para lastimar a cualquier francés que se atreva a hacer daño de alguna manera a la Madre Tierra.
“Hemos decidido reforzar masivamente los recursos de la oficina central para la lucha contra el daño al medio ambiente y poner en marcha 3.000 puestos de ‘policía verde’”, explicó.
“El objetivo es que, en cada brigada de gendarmería, haya gendarmes entrenados en ataques a la ecología. Será una revolución”, finalizó.
“Están usando cualquier excusa para obtener más poder”
La posible creación de este ejército verde viene del interés de los poderosos de la Unión Europea en la creación de una “Fuerza de Protección Civil”. En este sentido, el jefe de gestión de crisis Janez Lenarcic pidió la semana pasada que Bruselas recibiera más poderes para crearla directamente bajo su control.
Dicha fuerza, consiste en brigadas masivas de fuerzas del clima que recorrerán las calles de la ciudad y el campo en busca de infractores, para proteger a todos los estados miembros de los desastres que los políticos atribuyen al calentamiento global.
“Tenemos una sensación cada vez mayor de que se necesita más Europa en materia de protección civil”, declaró Lenarcic con respecto a la propuesta y argumentó que Bruselas podría brindar esta “protección” si se le otorgara más poder soberano sobre sus estados miembros.
Respecto al pedido de Lenarcic, el miembro del Parlamento Europeo por Rumania, Cristian Terhes, dijo que los “burócratas no elegidos” en la organización “están usando cualquier excusa para obtener más poder”.
“Estos burócratas europeos no son la solución, sino la causa de muchos problemas a los que se enfrenta la UE, y la crisis energética profundamente dañina es solo una prueba de ello”, señaló Terhes y agregó : “Entregar a estos burócratas irresponsables e incomprensibles aún más poder sería simplemente irresponsable”.
Finalmente, manifestó que “lo que Europa necesita es un renacimiento de la democracia nacional y soberana, con creatividad y poder para la población local, en lugar de un control burocrático único para todos desde el centro de Bruselas”.