La cantidad de escrituras de compraventa de inmuebles registró en julio una caída de 82% en la ciudad de Buenos Aires respecto de igual mes del año pasado, debido a las restricciones que enfrenta la actividad por la pandemia de coronavirus.
De acuerdo con información del Colegio de Escribanos de la Ciudad de Buenos Aires, en julio se concretaron 573 operaciones, con una caída interanual del 82,1%, y con un monto involucrado de $11.258 millones, un 41,9% menor al año anterior.
“Registramos 26 meses consecutivos de caída interanual, lo cual denota la gravedad de la situación. Si claramente el 2019 había sido el peor indicador, este año será muchísimo peor”, dijo el presidente del Colegio de Escribanos, Carlos Allende, en un comunicado.
Agregó que “en el afán de encontrar soluciones nos estamos reuniendo con entidades afines al sector inmobiliario, y hemos acercado propuestas al Gobierno local y nacional en cuanto a promociones y otras soluciones impositivas”.
El monto promedio por escritura en pesos fue de $19.647.591, con una suba interanual de 225%; mientras que en dólares el monto promedio fue de US$ 279.521, con una suba interanual de 102% en base a una cotización promedio del dólar de $ 72,44.
En tanto, en julio los actos cayeron 59,2% respecto de junio, cuando se habían concretado 1.405 de compraventa.
En julio hubo 32 escrituras formalizadas con hipoteca bancaria, por lo que la caída en este aspecto fue de 86,4%, y los primeros siete meses del año acumulan una baja de escrituras con crédito de 62,4%.
En diálogo con Ámbito Financiero, Alejandro Bennazar, presidente de la Cámara Inmobiliaria Argentina comentó que toma el informe y las estadísticas “dentro de la pandemia”.
“La pandemia lamentablemente es ingobernable para cualquier gobierno, para nosotros y para el mercado”, comentó.
Para el titular de la Cámara del sector, estas estadísticas son “una radiografía de cómo va moviéndose el mercado, más allá de las ventas o las escrituras; que reacciona como se puede y como va evolucionando los contagios, sumado a la retracción de poder mostrar los inmuebles”.
“Hoy el mercado inmobiliario argentino se está manejando como nunca con las noticias del minuto a minuto, es muy sensible a la información”, comentó. Además agregó: “Dejamos muy de lado las rentabilidades”.
Para Bennazar la problemática que enfrenta el sector pasa por la desconfianza de los compradores: “Entre los créditos con inflación, más la pandemia, se destruye la confianza”.
Sobre las medidas para paliar y tratar de revertir la situación, el martillero y corredor público dijo acercaron propuestas al Ministerio de Desarrollo Territorial y Hábitat: “El Ministerio interpreta que la reactivación va a venir por el mercado inmobiliario”.
“Hay varias áreas para reactivar: una es de la que se ocupa el Procrear, que bastante exitoso fue el programa. Otro aspecto lo cubre el mercado financiero, relacionado al mercado de capitales y la CNV; y otro lo ocupa el sector privado”.
“Creo que esas tres patas son fundamentales”, sentenció el titular de la Cámara Inmobiliaria Argentina.
*Fuente: Ámbito Financiero – Micaela Maldonado