¿Cuál es la situación del mercado de granos en plena pandemia?

"Se necesita una importante reactivación de la economía y la demanda por combustibles, algo que tomara tiempo", destaca Ricardo Passero, analista de INTL FC Stone.
rafaela-biazi-470405-unsplash.jpg
10 Years Experiences

Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipiscing elit. Ut elit tellus, luctus nec ullamcorper mattis, pulvinar dapibus leo.

En Chicago el cierre de la semana volvió a teñirse de rojo, con las siguientes variaciones:

  • Soja: – US$ 3,2 a US$ 305,2
  • Maíz: – US$ 1,2 a US$ 124,5
  • Trigo: – US$ 6,2 a US$ 194,8

Las compras de China no alcanzan para cambiar el sentimiento negativo que pesa sobre el mercado de granos por el desplome del petróleo. El USDA informó ventas de norteamérica por más de 600 mil toneladas esta semana, pero del otro lado hay expectativa de una gran campaña que ya se está sembrando en Estados Unidos.

Además, se suma la presión por el ingreso de la cosecha brasilera, en donde hay precios récord por la devaluación del real. “El avance de la cosecha sudamericana suma presión adicional a las cotizaciones”, destacó Fyo. Además, las condiciones climáticas se mantienen favorable en el midwest estadounidense.

En tanto, los futuros de trigo finalizaron con importantes pérdidas por ventas masivas de los fondos de inversión que buscan resguardo en activos menos riesgosos ante los temores por el coronavirus.

La Bolsa de Comercio de Rosario infomó que por soja, el valor de compra por la mercadería con entrega inmediata cayó a U$S 200 (pagaban hasta US$ 210). Por su parte, el precio ofrecido por el maíz con entrega contractual se ubicó en U$S 118 (hasta US$ 120).

La propuesta de compra por trigo Diciembre se deslizó a U$S 162. En tanto, el trigo disponible se ofreció a US$ 195 con descarga. En el Matba Rofex también hubo bajas generalizadas. El trigo diciembre cayó US$ 0,5 a US$ 168.

Por otro lado, la soja mayo cayó US$ 2,5 a US$ 212 y el maíz julio cayó US$ 0,9 a US$ 119.

¿Qué pasó esta semana?

Ricardo Passero, Director de Commodities INTL FC Stone Argentina, explica en diálogo con Agrofy News que el petróleo estadounidense West Texas Intermediate (WTI) llegó esta semana a cotizarse de U$S 18 por barril a un precio negativo. Además, el Brent alcanzó el valor más bajo de los últimos 18 años.

“No hay, literalmente, sitio para almacenar el petróleo, a lo que se han sumado las reservas ya almacenadas y las perspectivas siguen siendo que la demanda potencialmente siga cayendo, en un escenario con casi la mitad de la población mundial en aislamiento social”, destaca el especialista.

Passero comenta que los países de la alianza OPEP acordaron, semanas atrás, un recorte de 9,7 millones de barriles diarios (mbd) a partir del 1 de mayo para estabilizar los precios en el mercado de petróleo y revertir así la caída causada por la crisis económica derivada de la pandemia de COVID-19.

“La destrucción diaria en materia de demanda se calcula supera los 20 millones de barriles diarios. El consumo pasó de 100 millones de barriles diarios a 80 millones, y la baja puede ser aún mayor”, grafica y comenta que en Estados Unidos, en lo que va del año, el precio de la gasolina ya ha caído casi un 30% mientras que el diésel lo ha hecho en torno a un 20%.

Ricardo Passero

Lo que sucede es que en 1.989 sólo 8,15 millones de toneladas de la cosecha norteamericana de maíz se utilizaban para la producción de etanol, en el año 2018 llegaron a ser más de 142 millones, fueron 136,6 en 2019, y las estimaciones para el 2020 hablan hasta acá de cerca de 128,27 millones, una caída que supera los ocho millones de toneladas.

La cosecha de maíz en los Estados Unidos alcanzó en la campaña 2018/19 los 347,78 millones de toneladas, en un área sembrada que se ubicó en 36,3 millones de hectáreas, con rendimientos que superaron los 105 quintales por hectáreas: “Recordemos que fue una campaña caracterizada por diversas cuestiones climáticas, con desbordes de ríos por lluvias y deshielos”.

Ahora, el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA) estimó la siembra de maíz en su informe trimestral de marzo en 39,25 millones de hectáreas, lo que a priori nos hace pensar en una campaña con producción creciente y, claro está, con mayores niveles de inventarios finales frente a la caída de la demanda para la producción de etanol.

El área para soja se estimó en 33,79 millones de hectáreas, frente a los 30,8 de la campaña pasada.

El ratio soja noviembre/ maíz diciembre en el CBOT se encontraba el lunes en niveles de 2,34, lo que favorece al área de soja: “Esa relación a fines de febrero de este año estaba en niveles de 2,24”, explica Passero.

El reporte de siembra de maíz en Estados Unidos, publicado esta semana mostró un avance de siembra del 7% para maíz a la vez que los pronósticos de clima lucen altamente favorables para continuar las labores de campo, limitando factores de riesgo para el mercado.

“La sobreoferta de petróleo refleja la importante destrucción en demanda que el confinamiento está causando a nivel mundial, ejerciendo una importante presión bajista sobre el maíz, para lo cual es necesaria una importante reactivación de la economía y la demanda por combustibles, algo que tomara aún más tiempo”, concluye Passero.

*Fuente: Agrofy News


Search

Unite a nuestro grupo de Telegram, donde te compartimos las noticias más importantes.

PYMES EN ROJO | Recesión consolidada, fuerte caída del consumo y amenaza de cierres masivos

El Radar Pyme del tercer trimestre de 2025, elaborado por la Asociación de Empresarios y Empresarias Nacionales (ENAC), reveló que la economía argentina atraviesa una recesión consolidada, con ventas en baja, salarios depreciados y costos en alza. Según el informe, el 40,4% de las pymes reportó malas ventas y seis de cada diez trabajan sin ganancias.

El estudio advierte que “la economía argentina continúa sin señales de recuperación” y que el sector productivo nacional “opera por debajo de su capacidad real”. La utilización promedio del aparato productivo fue de 54,6%, cifra considerada preocupante por la entidad. En la industria, el nivel fue de 54,7%, por debajo del umbral del 60% que se asocia a un uso saludable de la capacidad instalada.

La encuesta, realizada entre más de 1.000 pequeñas y medianas empresas, muestra que el 88% enfrentó aumentos de costos y el 74% debió subir precios, aunque sin poder trasladar completamente la inflación. En el sector industrial, el 45,9% de las firmas registró fuertes caídas en las ventas, lo que confirma el deterioro del mercado interno.

El presidente de ENAC aseguró que “el consumo se derrumba”

El presidente de ENAC, Leo Bilinski, advirtió que “el 13% de los empresarios evalúa cerrar antes de fin de año”, ante un escenario de demanda deprimida y suba constante de costos. “Las familias están endeudadas hasta el 130% de sus ingresos y el consumo se derrumba”, detalló el dirigente.

En el frente laboral, solo el 17,1% de las firmas incorporó personal, mientras que un 19,7% despidió trabajadores. En la industria, los despidos trepan al 28,8%, con un resultado neto de -2,99% en el empleo pyme durante el trimestre.

El financiamiento, lejos de destinarse a inversión, se volvió una herramienta de supervivencia. El 21,3% de las empresas se endeudó para pagar impuestos y el 20,5% para cubrir salarios o aguinaldos.

A su vez, el 59% de las firmas denunció demoras en los pagos de clientes y el 47% más incumplimientos, generando una asfixia de liquidez: las pymes financian a sus compradores a 37 días, pero pagan a proveedores en 30.

Las expectativas hacia el futuro tampoco son alentadoras. El 76% de los empresarios cree que la economía seguirá empeorando y el 65% no planea invertir en el próximo trimestre. Entre los principales obstáculos, destacan la caída del mercado interno (75%), la pérdida de rentabilidad (55%) y la apertura de importaciones (43%), factores que, según ENAC, “amenazan la supervivencia de miles de pymes en todo el país”.



*Fuente: Diario Ámbito Financiero

Uno de cada cuatro pesos que pagan los consumidores por carne, leche o pan son impuestos

FADA (Fundación Agropecuaria para el Desarrollo de Argentina) publicó su informe semestral “Composición de precios: carne, pan y leche” y analizó la estructura de valor de la cadena desde la producción hasta el consumidor. El trabajo indicó que uno de cada cuatro pesos del precio final se destinó a impuestos y que, según la cadena, los costos, los tributos y las ganancias presentaron diferentes participaciones.

En carne vacuna, en agosto el kilo promedió $12.141. Sobre ese precio, los costos representaron el 52%, los impuestos el 28% y la ganancia el 20%. Por eslabones, la cría explicó el 26%, el feedlot el 22%, el frigorífico el 3%, la carnicería el 22% y los impuestos el 28%. 

Dentro de la carga tributaria, el 77% correspondió a tributos nacionales, el 17% a provinciales y el 7% a municipales; por tipo, se destacaron IVA (34,4%) y Ganancias (32,0%), seguidos por Ingresos Brutos (13,7%). La cadena absorbió $6.320 por kilo en costos, $3.449 en impuestos y obtuvo $2.472 de resultado. En el eslabón frigorífico, el informe indicó una pérdida de $2 por kilo. Los fletes de punta a punta de la cadena representaron el 1,4% del precio (unos $175 por kilo), y el costo laboral totalizó el 11% (equivalente a $1.345 por kilo). Entre febrero y agosto de 2025, el precio al consumidor subió 19% frente a una inflación de 14,2% y los costos perdieron participación, mientras que impuestos y ganancias la ampliaron.

En pan francés, en agosto el kilo promedió $3.199 (con diferencias regionales: $3.760 en GBA y $2.111 en el NEA). La composición del precio se integró por 60% de costos, 24% de impuestos y 16% de ganancias. Por eslabones, el trigo explicó el 8%, el molino el 4%, la panadería el 64% y los impuestos el 24%. La carga tributaria se distribuyó 79% nacional, 19% provincial y 2% municipal; por tipo, prevalecieron IVA (44,4%), Ganancias (28,4%) e Ingresos Brutos (18,2%)

La cadena afrontó $1.927 por kilo en costos, $760 en impuestos y obtuvo $513 de resultado. La producción de trigo registró un resultado negativo de -$11 por kilo de pan. Los fletes incidieron 1,7% del precio (unos $53,4 por kilo) y la mano de obra totalizó 34% (unos $1.060 por kilo), con mayor peso en panaderías. El informe señaló que el precio del trigo se multiplicó por 12 entre el campo y la panadería. Entre febrero y agosto de 2025, los costos aumentaron por encima del precio del pan, lo que redujo la participación de las ganancias e impuestos en el precio final.

En leche entera en sachet (1 litro), en agosto el precio promedió $1.653. La estructura se compuso de 71% de costos, 26% de impuestos y 3% de ganancias (unos $56 por litro). Por eslabones, el tambo explicó el 28%, la industria el 26%, el comercio el 20% y los impuestos el 26%. La carga impositiva se repartió 79% nacional, 17% provincial y 4% municipal; por tipo, IVA concentró el 67,9% y Ingresos Brutos el 16,3%. La cadena afrontó $1.175 por litro en costos y $422 en impuestos. Los fletes representaron el 6,5% del precio (unos $108 por litro), y la mano de obra totalizó el 18% (unos $299 por litro), con mayor peso en el comercio. 

En el tambo, el precio promedio pagado fue de $474 por litro, los costos estimados ascendieron a $479 y los impuestos a $8, por lo que el resultado fue negativo en $13 por litro. El informe consignó que el precio se multiplicó por 3,5 entre el campo y la góndola y recordó que la leche tributó 21% de IVA, a diferencia de carne y pan, que aplicaron 10,5%.

Respecto de los granos, el maíz explicó el 8% del precio final de la carne bovina y el 4% del de la leche; en el pan francés, el trigo explicó el 9% del precio. Con base en los coeficientes oficiales de conversión y los precios de agosto de 2025, FADA estimó que, en promedio, casi el 90% del precio de estos productos respondió a otros componentes (costos diversos, márgenes e impuestos).

“Uno de cada cuatro pesos que pagan los consumidores por carne, leche o pan son impuestos”

La economista de FADA Antonella Semadeni explicó la metodología: “Distinguimos entre los costos de producción, los impuestos y las ganancias de cada uno de los eslabones de la cadena”. 

En términos generales y en promedio, el 60% del precio que paga un consumidor son costos de producción, el 15% son las ganancias sumadas de toda la cadena y el 25% son impuestos. Es decir, uno de cada cuatro pesos que pagan los consumidores por carne, leche o pan son impuestos”.

Para graficarlo, agregó: “Supongamos, vamos a la carnicería, compramos un kilo de carne, bueno, de ese kilo de carne que yo pago, 250 gramos los estoy pagando en concepto de impuestos. Lo mismo en el caso de la leche, yo compro un sachet de leche de un litro, un vaso que me tomo, de los cuatro que me voy a tomar, uno son impuestos. Y lo mismo en el caso del pan, voy a la panadería, compro cuatro pancitos, uno que estoy pagando son impuestos”. 

Al analizar el rol del Estado en la cadena, planteó que “funciona como una especie de eslabón más, que se lleva más que el resto de los eslabones, y no cría el animal, no transporta, no vende, no asume riesgos, no invierte, no madruga, por así decirlo, pero cobra el 25% de cada precio final”.

HUMOR por Argüelles​

LO MÁS IMPORTANTE

TWEET DEL DÍA

Tevero liberavisse
comprehensam nec.

Copyright 2023 © Data 24 - Todos los derechos reservados
Data 24.com.ar © Copyright 2023

Subscribe Now