A un día de que se dicte lo que se presupone será la cadena perpetua, Magdalena Espósito Valenti (progenitora de Lucio Dupuy) y Abigail Páez (su pareja), fueron golpeadas por otras reclusas en el Complejo Penitenciario N° 1 de San Luis. Las imputadas permanecieron protegidas a tal punto que ni siquiera asistieron a las últimas audiencias del juicio, sin embargo, al ser trasladas al centro penintenciario esto cambió. Según trascendió por varios medios de San Luis, las acusadas habrían sido golpeadas salvajemente por otras reclusas.
Este viernes al mediodía se dará a conocer la sentencia que, se prevé, sea la cadena perpetua. Teniendo en cuenta los múltiples delitos que les fueron imputados a las acusadas y también las pruebas (incluyendo crueles chats contra el niño), la defensa de la familia espera que la condena no sea menor a la perpetua. Así como también exigieron que sean encarceladas en celdas separadas.
La condena será dictada tras 18 audiencias donde se expusieron los últimos meses de vida de Lucio, incluyendo las declaraciones de una vecina que denunció las agresiones en reiteradas oportunidades y el médico forense que trató el cuerpo del menor.
“Lucio fue abusado antes de su muerte”: la prueba que las acusadas se negaron a escuchar
En los últimos alegatos finales, el Ministerio Público Fiscal confirmó que las acusadas “agredieron en conjunto” al menor y lo “abusaron sexualmente con un objeto”. Valenti y Páez pidieron ser retiradas de la sala para no escuchar las pruebas.
El 17 de noviembre, en la cuarta audiencia, la progenitora de Lucio se negó a escuchar una de las pruebas que podría agravar aún más su pena y pidió ser retirada de la sala al igual que Páez. La prueba clave fue el relato de la autopsia, practicada por el forense Juan Carlos Toulouse, que determinó que Lucio fue abusado antes de su muerte.
Toulouse fue citado a relatar lo que la autopsia que él mismo hizo y aseguró que la víctima fue abusada horas previas a su muerte, pero también había indicios de abuso de “vieja data”. También presentaba “un fuerte golpe que le afectaba la cadera, el glúteo y la pierna, con una data de 7 a 8 días” antes de su muerte.
Toulouse aseguró que “hubo una agresión puntual que le provocó la muerte”, que fue una hemorragia interna provocada por la brutal paliza que le propinaron las agresoras. El cuerpo también tenía quemaduras de cigarrillo y mordidas.
“No hablo de todo lo que tenía por respeto al nene y a la familia pero tengo 27 años de forense y 5 años en La Plata, he visto nenes y traumatismos, pero esto así no lo vi nunca”, declaró el forense al medio Telefé tras hacer su presentación en el juicio.