La autocrítica de Gerardo Morales en medio de las negociaciones del Gobierno nacional con el FMI cayó como un baldazo de agua fría para los representantes del arco opositor. Tras las críticas recibidas por los principales referentes, el gobernador de Jujuy no dudó en enviar un mensaje a los funcionarios que integran su mismo espacio político.
“Imaginate, los halcones me pegan como para que tenga, pero no me preocupa, la del diálogo es la postura correcta. Acá hay gente que hace negocios políticos con la grieta, tanto el kirchnerismo como un sector muy radicalizado de nuestro espacio. Eso le hace muy mal al país”, sostuvo el mandatario provincial en una entrevista para Radio Mitre.
Y agregó: “Yo estoy muy convencido de lo que digo, la posición es esta, hay que ir al diálogo. Hay que hacer todo lo posible que se llegue a un acuerdo. Hay algunos en nuestro espacio que piensan que cuanto peor mejor y eso no le conviene a la gente. Veo algunos editoriales, también, que terminan tomando partido en esta grieta, porque también han sido muy duros desde el kirchnerismo. En Jujuy sufrimos mucho con la irracionalidad extrema, que es lo que representa el kirchnerismo. Pero en el tema de la deuda tenemos que tener un alto grado de responsabilidad”.
Respecto a las negociaciones que el gobierno busca encaminar con el organismo de crédito, adelantó hoy que el lunes 17 o el martes 18 de este mes los mandatarios de Juntos por el Cambio y los jefes del principal bloque opositor se reunirán en el Congreso con el ministro de Economía, Martín Guzmán.
“Hablé con Sergio Massa y me confirmó la presencia de Guzmán”, señaló y afirmó: “La gestión está en manos del gobierno nacional. No tiene mucho tiempo para acercar posiciones con el Fondo”
No obstante a las críticas impartidas dentro de la oposición, el gobernador apuntó a su vez contra el kirchnerismo: “Hay un discurso dual del Gobierno que no ayuda a lograr un acuerdo. A la oposición no nos toca gestionar. En el tema de la deuda hay una responsabilidad transversal a todos, incluso el mismo Pro, que por ahí se molesta porque fuimos nosotros a buscar al Fondo. Es mucho mayor la deuda que nos dejó Cristina y la que generó el Gobierno. Algunos se enojan pero es así, los que fuimos al Fondo fuimos nosotros. La reunión no resuelve situaciones, será el Congreso el que debata los números fino”, expresó.
En ese sentido, explicó que “las fuerzas políticas debemos bregar para que no haya default, pero esto pasa por las manos exclusivas del Gobierno. Este acuerdo con la CELAC y no plantear las violaciones a los DDHH y de fraude electoral en Nicaragua no nos parece bien. Los tiempos apremian y para todo el país es apremiante no caer en default porque lo vamos a pagar todos los argentinos. Podríamos volver al 2001 o a una hiperinflación. El tema da la deuda es de alta política”.