La comitiva que viajó junto al presidente Alberto Fernández por Europa fue eximida de aislarse de manera preventiva como el resto de los mortales que llegan a Ezeiza. Eso incluye a los funcionarios, los miembros de la custodia, y hasta los propios periodistas que fueron a cubrir el viaje.
La excusa para no cumplir con esa medida que se le recomienda a todos los argentinos que llegan del exterior fue que durante el viaje hubo 4 hisopados. Las condiciones del viaje, en plena pandemia y todos juntos en el mismo avión, obligó a extremar las medidas de seguridad. Todos los miembros de la comitiva sabían que si alguien daba positivo iba a tener que quedarse en el lugar.
El aislamiento es una de las medidas aprobadas por el Gobierno para las personas que viajan al exterior. Son 10 días a partir de la toma de la muestra en el exterior. Al séptimo día de la llegada, se debe realizar un nuevo testeo. La realidad es que muy pocos lo cumplen, pero sigue vigente.
Un positivo en la comitiva presidencial hubiera obligado a parar a otras personas por ser contactos estrechos. De hecho, compartían un avión cada 24 o 48 horas. Pero al igual que en el fútbol, en la comitiva presidencial, no existe el concepto de “contacto estrecho”.
En el caso del Presidente, no solo no se aisló, sino que viajó este martes a Misiones.
Alberto Fernández on Twitter: “En un viaje de campaña a Misiones, recibí a trabajadores de la empresa de calzado e indumentaria deportiva Dass. La apertura de las importaciones de la gestión anterior les hacía muy difícil competir en el mercado interno. Les pedí que aguantaran, que lo íbamos a ir arreglando. pic.twitter.com/BzAlbejxkx / Twitter”
En un viaje de campaña a Misiones, recibí a trabajadores de la empresa de calzado e indumentaria deportiva Dass. La apertura de las importaciones de la gestión anterior les hacía muy difícil competir en el mercado interno. Les pedí que aguantaran, que lo íbamos a ir arreglando. pic.twitter.com/BzAlbejxkx
*Fuente: Expediente Político