Bajo el slogan “Es tiempo de despertar a La Plata”, el diputado provincial de Juntos por el Cambio, Daniel Lipovetzky, busca dar el salto de la Legislatura al palacio municipal de cara a las próximas elecciones. Con un pasado como diputado nacional en representación de CABA y de buenas relaciones con el peronismo, el legislador se ve a sí mismo como el sucesor del actual intendente platense, Julio Garro.
La iniciativa despertó murmullos puertas adentro del espacio, en donde consideraron inadecuado que Lipovetzky, quien tiene domicilio en el barrio de Colegiales, en Capital Federal, se lance a la competencia en La Plata. Emulando a María Eugenia Vidal, quien se sintió “orgullosamente bonaerense” y, pocos meses después, se mudó a un coqueto barrio de Capital Federal, Lipovetzky estaría dispuesto a dar el salto.
Actualmente, es uno de los legisladores mejor pagos de la provincia. En efecto, Lipovetzky ostenta un jugoso salario de 508.518 pesos mensuales, poco más de medio millón de pesos cada treinta días. A pesar de ello, el legislador no ha tenido una buena relación con las instituciones económicas.
Crediticiamente, el por ahora precandidato de Juntos por el Cambio ostenta una importante deuda de 2.360.000 pesos en el Banco Santander Argentina SA y otra por 1.046.000 en el Banco de la Ciudad de Buenos Aires, por un total de 3.4 millones de pesos.
Con su humilde credencial de monotributista Categoría D, Lipovetzky se las supo arreglar para adquirir vehículos de alta gama, entre los que se destacan una Kia Sorento, un PT Cruiser, una Honda CR-V y una flamante Toyota SW4 4×4 valuada en algo más de 60 mil dólares.
En el padrón del gobierno de la Ciudad de Buenos Aires, el candidato a intendente acumula unas siete infracciones impagas con sus vehículos y varios juicios ejecutivos. En efecto, el juzgado de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo y Tributario Nro. 20, secretaría Nro. 40, le inició un juicio de ejecución fiscal.
Algo similar ocurrió en el juzgado de Primera Instancia en lo Contencioso Administrativo Nro. 1, donde tiene en despacho otro proceso de ejecución fiscal. Del mismo modo, un tercer juicio pesa sobre Lipovetzky en el juzgado Nro. 3.
El dirigente político de Juntos por el Cambio, quien a pesar de sus numerosas apariciones televisivas aún no logra ser conocido en la ciudad de La Plata, logró sacar partido de sus múltiples conflictos con el fisco. En efecto, y de acuerdo a la última declaración jurada presentada, correspondiente al año 2019, tendría seis lujosas propiedades.
De las mismas, dos de ellas se encuentran en la ciudad de La Plata y cuatro figuran radicadas en CABA. Lo que llamó poderosamente la atención es el valor declarado de las mismas, que no se condice de ninguna forma con el real. En efecto, según Lipovetzky y su contador, su departamento con cochera de 160 metros cuadrados en Capital Federal vale poco más de 3.500 dólares.
Del mismo modo, sus tres departamentos comprados en el 2003 y 2004, todos entre 40 y 45 metros cuadrados, tienen un valor de 1.500 dólares. Casi tan insólito como el valor de su casa, de la ciudad de La Plata, que a pesar de tener una ubicación privilegiada y 142 metros cuadrados, le costó 30 mil dólares.
Su esposa es Mónica Noemí Mielniczuk, quien también cobró un salario de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires hasta el año 2016. Los años siguientes fueron algo complejos, y fue dada de baja por la AFIP tras diez meses consecutivos sin pagar sus impuestos, tanto el monotributo como autónomos.
Mielniczuk también tuvo inconvenientes en la Justicia. En efecto, fue ejecutada por el Banco de la Ciudad de Buenos Aires por no pagar la hipoteca. Su causa, actualmente paralizada, estaba radicada en el juzgado civil Nro. 74. A pesar de ello, la pareja compuesta por Mielniczuk y Lipovetzky se las arregló para comprarse una costosa casa en el country Grand Bell, en las afueras de la ciudad de La Plata.
Entre deudas, multas impagas, juicios ejecutivos, vehículos de alta gama e impactantes casas con precios irrisorios, el diputado Lipovetzky se apresta a presentarse a la candidatura a intendente de la ciudad de La Plata. Con el paso de los días, habrá que ver cuántos militantes de su espacio, en vistas del escenario personal del legislador, deciden seguir apostando por el candidato.
*Fuente: REALPOLITIK