El comunicador cordobés Ramiro Torres fue atacado por sacar a la luz audios de la candidata a diputada nacional de La Libertad Avanza, Lilia Lemoine, quien lo utilizaba para poder generar operaciones de prensa contra políticos “no liberales”, amén de también hacia algunos propios del espacio de Javier Milei. Esto último dependiendo de si le caían bien, o no.
Durante los últimos días fue noticia como consecuencia de querer imponer en X (ex Twitter) la tendencia de que la vicepresidente Cristina Fernández de Kirchner le habría pedido un trío sexual al “León” libertario y una de sus ex novias: Daniela Mori. Claramente todo mentira, tan solo se buscaba mantener en la voz de los argentinos el nombre de Javier Milei.
Ahora bien, se filtraron nuevos audios, en dónde Lemoine buscaba atacar al cineasta de LLA, Santiago Oría, debido a que este tras las PASO había publicado que “salvó la campaña” de Milei. Por ende, Lilia habría decidido salir a atacarlo mediante el comunicador Ramiro Torres, alegando que el creador de contenido audiovisual “también cobraba un sueldo de la Legislatura porteña, pero ahora recibe mucho más en negro”.
Tras hacerse virales los audios, Lemoine salió a querer desmentir todo afirmando que se trataría de “contenido hecho con inteligencia artificial”. ¿Lo mismo que cuando negó cobrar un salario injustificado de “ñoqui” desde la Legislatura de Ciudad Autónoma de Buenos Aires? Lo cual luego terminó confirmando tras más de un año en Crónica, de la mano del dirigente gremial ferroviario Rubén Darío “Pollo” Sobrero.
Según pudo averiguar Data24, varias operaciones quedaron incompletas por parte del periodista Ramiro Torres, al ser “bizarras y muy poco serias”. Desde inventarle a Lilia un falso romance con el aspirante a jefe de Gobierno porteño, Ramiro Marra, hasta intentar que no se filtren supuestos robos de “sobrantes de campaña” para poder comprarse ropa, junto a la legisladora de CABA Lucia Montenegro.
Ante todo lo referido, es propicio dejar en claro que la candidata de Milei vuelve a generar polémica con sus acciones infantiles, mientras desde la mesa chica de Javier Milei no han tomado acciones en concreto. ¿Interna en puerta? ¿Rodarán cabezas de una vez por todas?