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El mes que viene comenzará a regir el nuevo incremento, luego de que se aprobara la Ley de Movilidad Jubilatoria en el pasado diciembre. Será el primero de cuatro aumentos que también regirán para AUH y AUE.
En diciembre del año 2020, el Congreso de la Nación sancionó la ley 27.609 por el cual se fijaron los parámetros que tomará la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) para determinar los aumentos y la cantidad de actualizaciones que tendrán los jubilados, pensionados y titulares de la Asignación Universal por Hijo y la Asignación por Embarazo, en el transcurso del año.
El aumento de las prestaciones de Anses será de un 8%, muy por debajo del recordado 20% que prometió Alberto Fernández en campaña, aún con el aumento las jubilaciones están por debajo del valor de un alquiler mensual promedio en la Ciudad de Buenos Aires.
¿Cuánto cobrarán a partir de marzo los jubilados y pensionados?
Si se toma como referencia el promedio de 8%, la jubilación mínima pasará de $19.035,29 a $20.558,09 y la máxima de $128.089,54 a 138.336,70.
Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), de $15.228 a $16.446,24 Pensiones no Contributivas (PNC) – Madre de siete hijos, de $13.324 a $14.390.
La jubilación mínima, la que cobra la gran mayoría de los jubilados solo obtendrá $1.323 de diferencia, mientras que para los pensionados la bonificación es inferior a la anterior, $1.218.
– Especial para Data24.com.ar –
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La imputación a Alberto Fernández por violencia de género a su expareja, Fabiola Yáñez, y la denuncia por corrupción en la contratación de seguros del Estado no afectan solo la imagen del expresidente: también impactan de lleno en el peronismo y, en particular, en el kirchnerismo.
Así lo señala una nueva encuesta de DC Consultores en la que la mayoría de los consultados asegura que es imposible que ambos espacios políticos se despeguen del escándalo en que devino la violencia física que se le imputa al expresidente contra la ex primera dama.
La denuncia que Yáñez presentó semanas atrás no solo destapó un escándalo mediático que puso en jaque a la ya golpeada figura de Fernández, sino que también generó un tsunami dentro del peronismo.
Es que la causa Seguros que denunció el primer titular de ANSES de Javier Milei,Osvaldo Giordano, destapó luego otro caso que posiblemente sea más sensible al ojo público: la violencia física, psicológica y de género que el expresidente presuntamente ejerció contra la ex primera dama.
La primera de estas investigaciones, la cual comenzó meses atrás, revela mensajes de texto de Fernández en los que se observa un presunto tráfico de influencias en la adjudicación de seguros estatales a intermediarios de la mano de Héctor Martínez Sosa, el marido de María Cantero, su histórica exsecretaria.
Fue un mensaje de esta última con Yáñez el que destapó el segundo escándalo y, luego, la denuncia de la ex primera dama, la cual vino acompañada con fotos de los golpes, declaraciones cruzadas, denuncias por consumo de sustancias y una infinidad de detalles que señalan una relación más que tormentosa entre Fernández y su entonces pareja.
Esta situación que, tal como marca Facundo Nejamkis, no solo “da cuenta de una conducta privada inversamente proporcional al comportamiento intachable que exige la investidura presidencial”, sino que también “desnuda la debilidad estratégica en la que se ubica el espacio peronista en general”.
Esto mismo analiza la última encuesta de DC Consultores realizada entre este lunes y martes sobre la imagen de Alberto Fernández y el peronismo en medio del escándalo: ¿Qué revela para el futuro del espacio?
LA CATÁSTROFE DEL ESCÁNDALO ALBERTO FERNÁNDEZ EN EL KIRCHNERISMO
La última encuesta de la consultora CD analiza el impacto en la sociedad de las causas judiciales recientes de Alberto Fernández, tanto la que lo investiga por favorecer el otorgamiento de seguros del Estado como la denuncia por violencia de género de Fabiola Yáñez.
Respecto a esta última, de los 3640 consultados, un 65,7% no cree ni las declaraciones de la ex primera dama, ni las del expresidente, mientras que un 35,1% le cree a ella y solo un 2,2% le cree a él: una clara señal de la crisis de credibilidad de Fernández.
La siguiente pregunta ya compromete a la expresidenta y entonces vice de Fernández, Cristina Kirchner, quien en 2019 fue la responsable directa de su candidatura: ¿Cree la gente que ella se podrá despegar políticamente de él? La respuesta es demoledora para el futuro político de Kirchner: un 77,4% cree que no podrá.
La respuesta es demoledora para el futuro político de Kirchner: solo un 22,6% cree que CFK será capaz de despegarse de los escándalos de Fernández, mientras que un 77,4% cree que no podrá.
Consultados sobre qué espacio político saldrá más perjudicado de esta causa, si el peronismo o el kirchnerismo (más alejado de Alberto durante su gestión), este último fue el más perjudicado: un 64,6% cree que el kirchnerismo sale peor parado, mientras que un 35,4% cree que lo hace el peronismo.
En el caso de las figuras políticas más afectadas, un 79,5% cree que los casos perjudican principalmente a Cristina Kirchner, mientras que un 14,2% cree que el gobernador bonaerense Axel Kicillof es el más golpeado. Sergio Massa, por su parte, solo alcanzó un 6,3%.
Las últimas dos preguntas se refieren particularmente al futuro electoral del kirchnerismo: un 68,5% cree que este espacio “termina con Alberto”, mientras que un 31,5% piensa que puede reconstruirse.
Este número muestra el gran desafío que La Cámpora tiene por delante: a la ya mala imagen que tiene en las encuestas, con sus dirigentes generalmente por debajo de Javier Milei y sus funcionarios, el escándalo de Alberto Fernández aparece como un clavo fatal en el cajón del kirchnerismo, espacio que deberá repensar de forma inteligente su armado para sobrevivir.
En esta línea, tan solo un 22,2% de los consultados votaría al kirchnerismo en las próximas elecciones, mientras que un 77,8% asevera que, “pongan a quien pongan”, no lo harían.
“Yo tengo más de quince asesores, seguro. Pero, tengo muchos en San Luis. Mi deseo es ser gobernador y para eso necesito mantener una estructura. Son mis módulos, puedo usarlos. Es gente que me ayuda con las reuniones, hacemos obras de beneficencia” reconoció Bartolomé Abdala, titular provincial del Senado Nacional.
“De esos quince, al menos 12 o 13 y están trabajando en mi provincia. Son de categoría baja”.
El conductor de “¿La Ves?”, Jonatan Viale, le retrucó: “Los asesores no son, Bartolomé, para que vos seas gobernador sino para que te ayuden a sacar leyes”.
“Es un criterio que es respetable el de ustedes los periodistas” se excusó el número 3 en la sucesión presidencial, luego de Javier Milei y Victoria Villarruel.
Todo muy bizarro. Al final, los contribuyentes siguen bancando a la maldita “CASTA”
El PRO se encuentra en plena ebullición política en la provincia de Buenos Aires. Con la mirada puesta en las elecciones legislativas de 2025, el partido busca fortalecer su estructura territorial en el distrito más grande del país. Cristian Ritondo, diputado nacional y presidente del PRO en Buenos Aires, recibió respaldo directo de Mauricio Macri para liderar este proceso, en un momento en que la formación política enfrenta desafíos internos y externos.
La estrategia del PRO en Provincia de Buenos Aires
Desde abril, Macri retomó un papel activo en la conducción del PRO, apuntalando su liderazgo en un escenario político en permanente fluctuación. Sobre principios del corriente mes, en un acto en La Boca, el ex presidente criticó duramente al gobierno de Javier Milei y enfatizó la necesidad de reforzar la identidad partidaria. Este mensaje se reflejó también en las órdenes dadas a Jorge Macri (en la Ciudad de Buenos Aires) y a María Eugenia Vidal (con la Fundación Pensar). Ahora, Macri delegó a Ritondo la misión de consolidar al PRO en Buenos Aires, una tarea que requiere no solo de liderazgo sino de una estrategia clara para enfrentar las próximas elecciones.
La provincia de Buenos Aires, con su enorme peso electoral, es vista como “la madre de todas las batallas”. No solo es el distrito más poblado del país, sino que históricamente fue un bastión del peronismo K. En este contexto, el PRO necesita fortalecer su presencia y evitar fugas hacia La Libertad Avanza (LLA).
El diputado Ritondo —con el apoyo de la intendenta de Vicente López, Soledad Martínez— está organizando un acto clave para finales de agosto o principios de septiembre. La excusa formal será la presentación de las nuevas autoridades del PRO en mencionada provincia, pero el objetivo real es mostrar el músculo político del partido y enviar un mensaje tanto a los militantes como a sus rivales.
Además, el acto buscará marcar una diferencia clara con Patricia Bullrich, ministra de Seguridad y líder de una facción interna del PRO que mostró una inclinación hacia una fusión con LLA. Ritondo, en cambio, apoya la idea de una colaboración puntual con los libertarios, pero rechaza una fusión total, en línea con la visión de Macri.
Desafío electoral y el factor “Colo” Santilli
El panorama electoral será determinante para el partido que lidera Macri. En Provincia se pondrá en juego seis bancas de la Cámara de Diputados, actualmente ocupadas por figuras como DiegoSantilli, Alejandro Finocchiaro y Hernán Lombardi. En la Ciudad de Buenos Aires, se renovarán tres escaños, incluidos los de María Eugenia Vidal y Fernando Iglesias.
Diego Santilli, conocido por su alta exposición y experiencia en campañas electorales, es visto como una figura clave para mantener la cohesión dentro del PRO y atraer a los votantes que podrían sentirse tentados por la oferta de La Libertad Avanza. Santilli, triunfante en la interna versus Facundo Manes del 2021 y precandidato a Gobernador en 2023, es considerado por Macri y Ritondo como el candidato ideal para liderar una convergencia que permita al PRO enfrentar con éxito al peronismo y a los libertarios.
El reciente rechazo en la Cámara de Diputados al Decreto de Necesidad y Urgencia que buscaba incrementar en $100 mil millones los fondos reservados para la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE) significó un duro revés para el gobierno de Javier Milei y profundizó las divisiones internas en el PRO, uno de los principales partidos de la coalición Juntos por el Cambio.
El presidente del PRO, Mauricio Macri, fue quien tomó la iniciativa de instituir a su bloque de la Cámara Baja a dar quórum en la sesión especial que finalmente resultó en la anulación del decreto. Esta decisión no solo tensó las relaciones con el gobierno, con quien el PRO había tenido una colaboración cercana en el pasado, y también expuso las fracturas dentro de su propio partido.
El DNU de Milei fue presentado en un contexto de creciente preocupación por la seguridad nacional y las amenazas del narcotráfico. El gobierno argumentó que estos fondos eran esenciales para fortalecer la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal y garantizar una mayor seguridad para los argentinos. Sin embargo, la falta de claridad sobre el uso de estos fondos y el “contexto económico” llevó al expresidente y a su círculo cercano a oponerse a la medida.
La decisión no fue unánime dentro del PRO. El sector liderado por Patricia Bullrich —ministra de Seguridad y una de las principales figuras del partido ahora cercana a LLA— se desmarcó de la postura del PRO y criticó duramente la decisión de rechazar el decreto. Bullrich, también desde Twitter, defendió la necesidad de estos fondos para combatir el narcotráfico y proteger a los argentinos, acusando a quienes se opusieron al DNU de “ponerse del lado de las mafias y el terrorismo”.
“La SIDE quedó desmantelada tras la administración de Alberto Fernández y requería dinero fresco para fortalecer la seguridad”, argumentó la ministra, quien lamentó la “inconsciencia” de los que, según ella, no tomaron en cuenta los riesgos que implica rechazar estos fondos.
UNA VOTACIÓN QUE EXPONE DIVISIONES
La votación en la Cámara de Diputados reflejó severas tensiones internas. Mientras que los diputados leales a Macri, como Álvaro González, Daiana Fernández Molero y Héctor Stefani, dieron quórum y votaron a favor de rechazar el DNU, otros, como Fernando Iglesias y Silvana Giudici, optaron por la abstención. Algunos diputados, como Hernán Lombardi y Sabrina Ajmechet, decidieron ausentarse, lo que evidenció la falta de consenso dentro del bloque.
Por otro lado, los diputados cercanos a Bullrich, como Damián Arabia y Patricia Vásquez, votaron en contra de la anulación del decreto, alineándose con La Libertad Avanza, el partido de Milei. Esta divergencia en la votación mostró que, a pesar de la instrucción de Macri, Bullrich aún mantiene un considerable apoyo dentro del PRO.
El comunicado oficial del PRO, titulado “Esto no es el cambio”, dejó en claro la postura de la cúpula partidaria frente al DNU de Milei, enfatizando la importancia de instituciones fuertes y transparentes, y de un gobierno austero.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, habló sobre la posibilidad de un acuerdo entre La Libertad Avanza y el PRO para enfrentar las próximas elecciones y lo consideró como algo “bastante natural”.
“No tendría ningún problema en que haya un acuerdo, hay que ver cuál es el camino pero no lo descarto. El Pro es un partido con buenos dirigentes, está claro que el Gobierno es de Milei pero no veo porqué no podemos llegar a un acuerdo para enfrentar las elecciones próximas“, señaló.
También hizo referencia a Mauricio Macri, quien chocó con el Gobierno en el Congreso a raíz del presupuesto de US$ 100 millones a la SIDE impulsado por Javier Milei: “Se constituyó la Comisión de Seguimiento el martes y el miércoles Diputados rechazó el DNU por el cual se ponía una partida presupuestaria para la SIDE. Es ilógico cuando esa comisión ni llamó al secretario para ver en qué se va a gastar a la plata“.
“Si Macri habla de falta de gestión o de coordinación, puede ser…. tal vez en este trabajo nos haya faltado coordinación pero será cuestión de volver a construirla”, agregó.
En cuanto a la vicepresidenta Victoria Villarruel, quien ha tenido algunos cortocircuitos con la opinión de la cúpula ejecutiva, por ejemplo la nominación de Ariel Lijo a la Corte Suprema , manifestó: “Es una persona que una imagen parecida a la del Presidente pero tiene menos responsabilidad política, está en el Senado. Es normal que pueda haber diferencias, a mi no me preocupa, sustancialmente creo que piensan lo mismo, creo que pueden tener diferencias, ella lo manifestó en más de una oportunidad”.
En un discurso que tuvo lugar hoy en los tribunales de Comodoro Py, la exvicepresidente Cristina Fernández de Kirchner, arremetió contra el feminismo, movimiento del cual “tomó distancia” en los últimos años. Durante su testimonio en el juicio por el intento de asesinato que sufrió el 1 de septiembre de 2022, aprovechó para hacer un repaso de los ataques y las “agresiones” del periodismo que vivió durante sus dos mandatos presidenciales (2007-2015), denunciando la falta de solidaridad de las militantes feministas en esos momentos críticos.
Fernández de Kirchner evocó, entre otros incidentes, un episodio ocurrido en 2008 durante el conflicto con el campo, cuando apareció ilustrada públicamente con un ojo morado, caricaturizada en Clarín por el reconocido artista argentino, Hermenegildo Sábat: “El negocio de pegarle a Cristina, hasta con un ojo negro… miren qué contexto actual”, expresó la burócrata, en un claro guiño a la denuncia de Alberto, alegando que el hecho fue un acto de violencia simbólica y mediática contra ella por ser mujer, pero que nunca recibió el apoyo de las feministas.
A pesar de haber sido la primera y única mujer electa presidenta, Cristina subrayó que el movimiento feminista jamás la respaldó en situaciones del estilo, lo que consideró un acto de indiferencia ante la “misoginia” que enfrentaba. “Nunca, nunca, nunca nadie dijo nada sobre esto”, reclamó a las mujeres del movimiento. En esa línea, la exmandataria fue enfática al recordar que nunca se identificó con el llamado feminismo radical, afirmando que “todos saben que no soy feminista”.
EL DISCURSO DE CRISTINA CONTRA LAS FEMINISTAS
Esta declaración no es la primera vez que Cristina Kirchner se muestra crítica. En mayo de 2024, durante la inauguración del “Salón de las Mujeres del Bicentenario” en el Instituto Patria, la condenada hizo hincapié en que su perfil nunca fue feminista —un intento evidente de distanciarse de un movimiento que, según su percepción, perdió apoyo popular—. Así, dejó claro que, aunque en algún momento el feminismo fue un aliado estratégico, hoy visto como un lastre que espanta a votantes, sobre todo en un escenario político donde el fenómeno libertario desplazó a las corrientes progresistas de la agenda.
Las palabras de la expresidenta en Comodoro Py, cargadas de críticas hacia aquellos que considera responsables de la violencia en su contra, podrían verse como un último intento de reposicionar su figura en el tablero político. Sin embargo, la reacción de los distintos sectores, tanto feministas como no feministas, ante sus declaraciones pone en cuestión la efectividad de esta nueva narrativa. La relación de la líder del kirchnerismo con el feminismo fue siempre ambigua, y sus recientes declaraciones parecen ser un esfuerzo por marcar una diferencia con la línea feminista más radical que, en sus palabras, “ha espantado hasta a las propias mujeres”.
No conozco jubilados que prendan fuego tachos, les peguen a la policía y marchen encapuchados. Esta es la máxima expresión de militantes políticos que solo buscan el Kaos. pic.twitter.com/KLZajYzTa4