El juez federal de Campana, Adrián González Charvay, dispuso el levantamiento del secreto bancario, fiscal y bursátil del ministro de Transporte de la provincia de Buenos Aires, Jorge D’Onofrio, quien también fue imputado en la causa por presunto lavado de dinero, y de otros implicados en esta investigación. Entre los involucrados se encuentra Claudia Pombo, concejal de Pilar y estrecha colaboradora del funcionario, además de familiares de esta y otros actores clave en el esquema investigado.
La causa, que está en etapa inicial, se centra en supuestas maniobras ilegales vinculadas al cobro de fotomultas y la Verificación Técnica Vehicular (VTV). La denuncia fue presentada por Leandro Camani, presidente de Secutrans, quien reportó pérdidas millonarias debido a un sistema paralelo de “gestores”. Estos intermediarios habrían eliminado multas a cambio de pagos ilegales, afectando la recaudación de Secutrans y desviando enormes sumas a cuentas personales de los acusados. Según la presentación judicial, esta red operaba con el consentimiento y participación activa de altos funcionarios públicos y figuras del ámbito judicial.
La investigación judicial reveló que solo el 2% de las multas de tránsito se cobran por vías legales, mientras que un estimado de 340.000 infracciones mensuales, por un valor aproximado de 60.000 millones de pesos, habrían sido gestionadas de manera ilícita. Esta cifra ilustra la magnitud del esquema de corrupción y su impacto sobre las finanzas provinciales. Este sistema, según la denuncia, involucraba jueces de faltas, funcionarios provinciales y operadores políticos que actuaban en complicidad. La estructura ilegal se extendía a varias localidades bonaerenses, generando un impacto económico significativo en la recaudación provincial.
Entre los investigados se encuentran Roxana Pombo, hermana de Claudia y funcionaria del Ministerio de Transporte, y Mario Quattrochi, juez de faltas platense señalado como pieza clave en la estructura ilegal. Según el fiscal Sebastián Bringas, la red de corrupción podría extenderse incluso fuera del país. En este sentido, se solicitó a las autoridades españolas información sobre la firma Cattleya Blue SL, vinculada a Pombo y Quattrochi, que operaba restaurantes en Málaga con fondos presuntamente desviados. Además, se ordenó el levantamiento del secreto bancario de Quattrochi y se solicitó al Registro de la Propiedad del Inmueble información sobre los bienes que posea.
Además, el juez ordenó a entidades como el Banco Central, la Unidad de Información Financiera (UIF) y la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires (ARBA) que proporcionen información detallada sobre las cuentas, bienes y transacciones de los involucrados. Estas medidas también incluyeron solicitudes a la Caja de Valores para identificar posibles tenencias de acciones y bonos, e Interbanking SA para obtener detalles sobre transacciones realizadas mediante medios electrónicos. Adicionalmente, se busca rastrear operaciones vinculadas a criptomonedas y transferencias internacionales, ampliando significativamente el alcance de la investigación.
El clan Pombo, cuyo nivel de vida despertó sospechas, reside en una lujosa propiedad en un country exclusivo de Zona Norte y exhibe en redes sociales un alto poder adquisitivo. Investigadores judiciales señalan que el dinero obtenido del esquema de corrupción habría sido utilizado para adquirir propiedades y bienes de lujo en Argentina y España. Además, se estima que el esquema generó pérdidas mensuales de entre 4 y 10 millones de dólares para Secutrans.
Matías Yofe, dirigente de la Coalición Cívica en Pilar, destacó: “Nunca podrían justificar su vida de millonaria”. Las acusaciones incluyen el consumo de bienes extravagantes como champagne Lamborghini y la contratación de personal doméstico, a pesar de ingresos formales que no lo justificarían. Entre las propiedades bajo investigación se encuentra una casona con ascensor y varios vehículos de alta gama, mientras que en el extranjero se habrían realizado inversiones millonarias en inmuebles.
La trama no solo afecta al área de Transporte provincial. En paralelo, el fiscal platense Álvaro Garganta investiga contratos irregulares relacionados con la VTV y supuestas concesiones amañadas a empresas privadas vinculadas al entorno de D’Onofrio. Entre estas se encuentra Soluciones en Telecomunicaciones y Electrónica S.A., presidida por Sebastián Desio, contratada por concesionarias de la VTV para brindar servicios tecnológicos a cambio de un 8,5% adicional por cada verificación.
Garganta también puso el foco en una propiedad en La Plata supuestamente vinculada al esquema y en contratos firmados con concesionarios del sistema de VTV que habrían beneficiado a socios y allegados del ministro. Además, tiene en su poder 22 cajas con pliegos y otra documentación entregada por el Ministerio de Transporte, que será analizada como parte de la investigación. Por su parte, el entorno de D’Onofrio asegura que el fiscal recibió toda la información solicitada y más, con el fin de demostrar que no hubo irregularidades en los procesos de contratación. Según fuentes judiciales, la empresa de Desio carecía de experiencia en el sector antes de recibir contratos millonarios, lo que refuerza las sospechas sobre irregularidades en los procesos de adjudicación.
Desde el Frente Renovador, espacio político de D’Onofrio, han surgido cuestionamientos internos. Voceros señalaron que “hace cinco meses le dijimos a (Axel) Kicillof que se necesitaba un cambio en Transporte”. No obstante, el gobernador bonaerense mantiene al ministro en el cargo.
En el plano local, Claudia Pombo fue desplazada como presidenta del Concejo Deliberante de Pilar en medio del escándalo, siendo reemplazada por Juan Pablo Trovatelli, también del oficialismo local liderado por el intendente ultra-K, Federico de Achával. La concejal no asistió a la sesión extraordinaria donde se definió su salida, una muestra de las tensiones políticas generadas por la causa. Desde sectores opositores, señalan que este cambio en la conducción del Concejo busca desvincular al gobierno local de las acusaciones que pesan sobre Pombo y su entorno.
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