Este martes, el juez federal Sebastián Casanello dictó un año de condena para Osvaldo Di Risio y seis meses de prisión para Fidel Omar Chiapperi, además de inhabilitación absoluta para ejercer cargos públicos por el doble del tiempo de la condena. Ambos trabajan en la Administración Federal de Ingresos Públicos (AFIP), Di Risio como Subdirector General de Operaciones Impositivas Metropolitanas y Chiapperi como Director de la Dirección Regional Central del organismo.
El magistrado los encontró culpables del delito de abuso de autoridad y consideró que, fueron parte de una campaña de desprestigio contra Carrió, mediante la utilización de facultades y potestades propias de sus cargos durante la campaña electoral del 2013. Además, el juez Casanello también requirió investigar la posible participación en el ilícito de otros funcionarios de la agencia y de terceros que también pudieran haber sido parte de los actos delictivos. Los fundamentos del fallo se darán a conocer el próximo lunes 26.



Para llegar a confirmar la condena fue clave la declaración de más de quince testigos, quienes afirmaron las irregularidades cometidas por los funcionarios de la AFIP. Además de los testigos, el juez utilizó “entrecruzamientos de comunicaciones telefónicas” que exhibían la maniobra elaborada que tenía como único fin dañar la imagen de Lilita Carrió durante la campaña electoral del año 2013. Cabe destacar que, esta campaña de desprestigio se realizó durante las presidencias de los Kirchner, es por ello que el juez entendió que se utilizó recursos del organismo recaudador para perseguir y desacreditar a la oposición con obvios fines políticos.
El fallo de Casanello no tiene precedentes, ya que se condena a juicio oral y público a altos funcionarios de la AFIP por haber utilizado al organismo. Esta es la primera vez se le logra probar y condenar a funcionarios de la Administración Federal de Ingresos Públicos por el delito de persecución fiscal.