El concepto de mufa, utilizado hacia personas o hechos que “traen mala suerte”, adquirió significativa presencia dentro del argot futbolero.
Recordado es el ejemplo popularizado por el querido ex técnico del seleccionado argentino, Carlos Salvador Bilardo y su historia con (el apodado) “Kiricocho”, quien fuese un aficionado de Estudiantes de La Plata que, cada vez que acudía a los entrenamientos de su equipo, éste perdía o sufría alguna desgracia de nivel futbolístico. Por lo tanto, el director decidió enviar a Kiricocho a los entrenos de los equipos rivales. La acción “surtió efecto”, pues su club salió campeón del Torneo Metropolitano en 1982, tras ganar todos los partidos como local a excepción de uno contra Boca, conjunto al que Kiricocho no pudo visitar previamente.
En la actualidad, puede escucharse cómo algunos jugadores profesionales “invocan” a Kiricocho para que el rival falle o salga perjudicado de una situación que pueda implicar un gol del contrario. Caso similar rodea al “influencer” conocido como Chapu Martínez, quien logró una enorme masividad durante sus actuaciones “graciosas” durante el Mundial de Fútbol de Rusia, en 2018, y específicamente con su canto “tráeme la copa, Messi”.
Si bien la infinita mayoría de simpatizantes del mundo mantiene una sólida fe para/con el gran equipo de Lionel Scaloni, tras la desafortunada derrota en el partido debut de la Selección Argentina contra Arabia Saudita, el apodo del influencer es tendencia en redes sociales con mensajes ardientes contra Martínez, a quienes miles de hinchas lo acusan de dar “mala suerte”.