El gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, presentó el Presupuesto 2025 en la Cámara de Diputados de la provincia. El proyecto incluye una inversión sin precedentes en obra pública y significativos incrementos en las áreas de salud, educación y seguridad. La medida se enmarca bajo el manto de una política de austeridad, eficiencia y baja de impuestos, con el objetivo de equilibrar las finanzas provinciales, reducir el déficit y fomentar el desarrollo.
El presupuesto provincial es “la ley de leyes. Define cuáles van a ser las prioridades de la
gestión”, comenzó diciendo el mandatario, quién resaltó que es “la primera vez que se presenta de forma totalmente digital”.
Presupuesto 2025
Presupuesto-General-de-la-Administracion-ProvincialLa medida prevé destinar más del 8% del gasto a la obra pública, duplicando el promedio del 4% de los años anteriores. También se anunció un incremento del 3,58% en salud; un 2,78% en educación y un 1% en seguridad. Frigerio destacó además que, a pesar de enfrentar un 20% menos de ingresos en comparación con el año 2023, su administración logró mantener los servicios esenciales y reducir la deuda en dólares heredada (pasará del 96% en 2023 al 88% proyectado para 2024).
Inversión en obra pública: “Resolvimos la deuda heredada”
La pieza central del presupuesto es la inversión en infraestructura, que alcanza el 8,4% del gasto total provincial, marcando un hito histórico en la gestión de obras públicas. Las partidas se enfocarán en la mejora de escuelas, rutas y hospitales, con la meta de impulsar el desarrollo económico y mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Frigerio enfatizó la importancia de esta inversión para el futuro de la provincia: “El verdadero desarrollo se logra con más y mejor educación pública, con más y mejor salud pública, garantizando la seguridad, sacándole el pie de encima al sector privado y haciendo las obras de infraestructura necesarias para impulsar la producción y la industria”, enfatizó.
Aumentos en educación, salud y seguridad
Otra de las prioridades es el refuerzo de las áreas de salud, educación y seguridad. En su discurso, explicó que la salud recibirá un incremento del 3,58% que permitirá mejorar la atención en hospitales y en centros de atención primaria. La educación, por su parte, verá un aumento del 2,78% para mejorar la infraestructura escolar y garantizar que los docentes reciban un salario competitivo. En cuanto a la seguridad, el presupuesto asignará un 1% más, centrado en fortalecer las Fuerzas de Seguridad y su equipamiento.
El presupuesto entrerriano contempla entrar en vigor entre medidas de austeridad que buscan optimizar el gasto. Entre las acciones implementadas se encuentran la reducción de impuestos, la eliminación de los gastos reservados, la reducción de la planta de vehículos oficiales y el control de ausentismo de empleados públicos. Frigerio subrayó la importancia de estas medidas para garantizar que “cada peso sea utilizado en beneficio de los entrerrianos”.
Otro de los logros destacados fue la reducción de la deuda en dólares, que pasó del 96% en 2023 al 88% proyectado para 2024. El gobierno cumplió con los vencimientos de deuda sin necesidad de recurrir al default, a pesar de enfrentar un 20% menos de ingresos que en 2023.
Frigerio también se refirió a las gestiones que su administración está llevando a cabo ante el Gobierno Nacional de Javier Milei y organismos multilaterales para acceder a financiamiento destinado a grandes obras de infraestructura, por un valor cercano a los 600 millones de dólares. También dio protagonismo a las “batallas” que está librando para recuperar fondos, entre ellas, las presentaciones ante la Corte Suprema de Justicia por el financiamiento del déficit de la Caja de Jubilaciones y los excedentes de Salto Grande.
Metodología “Base Cero”
El Presupuesto fue elaborado bajo la metodología “Base Cero”, una herramienta que permite evaluar la eficacia de los programas existentes y priorizar aquellos que generen un mayor beneficio para la población. Según el secretario de Finanzas de Entre Ríos, Uriel Brupbacher, esta metodología implicó un análisis profundo de cada política pública que permitió optimizar el uso de los recursos y garantizar una gestión eficiente.
“Es una mirada introspectiva que permitió eliminar programas que no se ejecutaban o no tenían sentido”, explicó el funcionario, quien destacó que mencionada herramienta fue clave para la elaboración de un presupuesto equilibrado y ajustado a las necesidades reales de la provincia.
–