El diputado nacional Leopoldo Moreau le solicitó al juez subrogante de Dolores, a cargo de la investigación de Alejo Ramos Padilla, visitar en la cárcel de Ezeiza al detenido Marcelo D´Alessio. El supuesto abogado está preso desde febrero del 2019 por la causa por tentativa de extorsión y haber participado de una supuesta asociación ilícita dedicada a realizar tareas de inteligencia.
El juez federal de Azul que subroga el juzgado de Dolores es Martín Bava quien recibió el pedido formal de visita a D´Alessio del titular de la Comisión de Fiscalización y Seguimientos de Organismos y Actividades de Inteligencia. El ex radical Moreau es uno de los impulsores mediáticos de la llamada «espiadura» y considera que Mauricio Macri estaba detrás de las actuaciones de D´Alessio a pesar de que el detenido fue funcionario de ENARSA y ex vocero del gobernador de Formosa peronista, Gildo Insfrán.
Lo llamativo del pedido que sorprendió a sus receptores son los motivos que tendría el diputado nacional para visitar a una persona de la que dijo de todo menos lindo en televisión y que lo considera un partícipe necesario del plan de persecución política y armado de causas judiciales para perjudicar a su Jefa Política, Cristina Kirchner.
Un diputado nacional que solicita visitar a un preso a meses de la campaña electoral es, al menos, sugestivo. Bajo la órbita de Moreau se desempeña la abogada defensora del denunciante de D´Alessio, Pedro Etchebest. Se trata de la abogada laboralista Natalia Salvo, ex columnista del portal donde se publicó el escándalo, del vacunado vip, Horacio Verbitsky.
La causa Dolores está estancada. La Cámara Federal de Mar del Plata volteó gran parte de la investigación de Ramos Padilla y revisó los procesamientos de dos de los objetivos del Instituto Patria: el fiscal de la causa Cuadernos, Carlos Stornelli, y el periodista de investigación, Daniel Santoro.
¿A qué irá Moreau a Ezeiza? ¿Qué mensaje le dará a D´Alessio? ¿Cuáles son sus objetivos? Días atrás, el detenido acusó a sus denunciantes -entre ellos el supuesto despachante de aduana, Gabriel Traficante, de adulterar pruebas en su contra sin que el juez Luis Rodríguez se diese cuenta de semejantes irregularidades. Misma situación habría ocurrido en el juzgado de Dolores. D´Alessio sostiene la hipótesis de que Etchebest era parte del armado de la causa judicial. Ahora se metió el «marciano» Moreau, juez y parte en esta historia de relatos y armado de causas judiciales.
*Fuente: Periodismo y Punto
