Como habitual caja de resonancia de la política local, el Concejo Deliberante de La Plata fue escenario en la semana que termina de nuevos cruces entre oficialismo y oposición. Esta vez, en el marco de la presentación de la Rendición de Cuentas del 2022, el Frente de Todos cuestionó que se expuso “fuera de término”, según lo establecido por la Ley Orgánica de Municipios, que establece como fecha límite el 31 de marzo.
El peronismo puso el grito en el cielo y se quejó de que el Ejecutivo buscó “meter la rendición por la ventana” y que sea analizada por el bloque del FdT en menos de 48 horas. La Comisión de Hacienda, conformada por 8 ediles (5 de Juntos), no reunió el quórum por la ausencia de la radical Manuela Forneris, lo cual fue la excusa ideal para que de una y otra vereda se tiraran con “chicanas”.
En los papeles, el oficialismo la presentó a mediados de la semana con una importante inversión en la ejecución de obras viales y el recambio de luminarias LED, entre otros ítems. Ello alcanzó los 34 mil millones de pesos, cifra que fue tildada de “poco transparente” por el bloque del FdT que comanda la científica de CONICET y “protokirchnerista” Yanina Lamberti.
Garro y su idea de dar con la unidad en La Plata
Mientras en el plano legislativo los ediles se preparan para escenificar sus diferencias y discutir en el recinto uno de los temas de mayor importancia en la agenda parlamentaria, el otro es el Presupuesto. En plano interno, la apuesta del oficialismo es domesticar las fisuras internas y que el intendente Julio Garro vaya a las urnas evitando el desgaste de las primarias.
Esta apuesta no le conviene ni al radicalismo, mucho menos al “ala” dura del PRO, que tiene entre sus filas a varios “Halcones” que buscan subirse el precio de cara a una eventual primaria. Uno es Daniel Lipovetsky, diputado bonaerense que milita la candidatura de Patricia Bullrich, espacio donde también comulgan Julio Irurueta y el caído en desgracia Juan Pablo Allan, quién soñaría repetir otro mandato en el Senado bonaerense.
El legislador bonaerense del PRO destaca y coincide en los lineamientos generales de Bullrich en materia de lucha contra la inseguridad y cuestiona la falta de políticas integrales en la ciudad para combatir el flagelo de los “motochorros”. Sin embargo, en las encuestas no logra dar con un buen número.
El peronismo desorientado
Del otro lado de la vereda, el peronismo sigue sin definiciones concretas en materia de candidaturas y en ese escenario la figura del ex intendente Julio Alak, ungido por Axel Kicillof como el dirigente ordenador de la interna, aparece como lo más sólido del espacio en el que conviven cristinistas, massistas y albertistas.
Todavía no hicieron oficial sus postulaciones pero brindaron sugestivas insinuaciones la titular del Instituto Cultural, Florencia Saintout, la ministra de Desarrollo Social, Victoria Tolosa Paz, y un puñado de “actores” secundarios que buscan sobrevivir al hormiguero pateado en que se transformó el panperonismo como los ediles Luis Arias y Guillermo Escudero, Guillermo Cara (referente de Kolina) y Gastón Castagneto, referente de una de las agrupaciones afines al cristinismo que lo hizo edil.