A pesar de que el Gobierno cerró las paritarias estatales con un monto del 20% hasta septiembre, los trabajadores de la salud continuaron con las protestas. El día martes, autoridades del Ministerio de Salud del Gobierno de Jujuy, se reunieron con directivos del Hospital Pablo Soria para dar un mensaje de amedrentamiento e impedir que los trabajadores salgan a las calles. Las amenazas consistían en descontar el día a quienes salen a protestar y rescindir contrato a quienes están en la categoría más baja.



“Nos dijeron que si los contratados salen o si salen personal de planta nos van a afectar a nivel laboral, ya sea con descuentos”. “Nos vamos a movilizar lo mismo, con el turno tarde, turno noche, con las familias. La situación económica no da para más, es un abuso a los empleados de la salud”. “No vamos a permitir estos aprietes de parte del Gobierno cuando vivimos una situación económica grave, quienes sufrimos necesidad”, manifestaron referentes de los autoconvocados en la puerta del hospital Pablo Soria.
“La lucha va a seguir, lo que estamos pidiendo es más que justo. Los contratados fueron amenazados con el quite de contratos, son quienes estuvieron en la pandemia y fueron usados por el Gobierno”.
“Le decimos al ministro Buljubasich que esto no termina, recién empieza. Vamos a seguir presentando petitorios y exigir respuestas a nuestros pedidos. Cada uno que estamos aquí representamos a un grupo familiar que son a quienes tenemos que mantener. No vamos a dejar de hacerlo hasta tener una respuesta favorable”, sentenciaron los referentes.
Por lo pronto, ya anunciaron que durante la semana, habrá más paros y movilizaciones en Jujuy.